El selenio y la vitamina C son dos complementos que aportan muchos beneficios al organismo, al igual que el zinc. En este artículo vamos a hablar de las propiedades y beneficios de estos dos componentes (selenio y zinc), tanto por separado como combinados con vitaminas A, C y D y cómo puedes beneficiarte de ellos gracias a Fepadiet.
Selenio y zinc: propiedades
Beneficios del Zinc
Tanto el zinc como el selenio proporcionan una mejor metabolización hormonal, especialmente en la tiroides y el sistema reproductivo. Además, frenan el envejecimiento general y en especial el de la visión. En el caso del zinc favorece la síntesis del ADN, una división celular correcta y mantiene la testosterona en niveles normales, algo muy beneficioso para la reproducción y la fertilidad.
El zinc también fortalece la síntesis de las proteínas y la metabolización de los ácidos grasos y ofrece una protección muy importante a las células contra los radicales libres, que son los principales causantes del envejecimiento.
Además, el zinc es un nutriente que funciona muy bien en personas que desean controlar su peso, ya que favorece una buena metabolización de los macronutrientes, ácidos grasos y carbohidratos. Si combinamos el zinc con la vitamina A y C, nos ayuda a mantener una mejor visión.
Beneficios del selenio
El selenio, al igual que el zinc, también protege contra los radicales libres y proporciona una barrera de protección contra el estrés oxidativo. Gracias al selenio, se forma la enzima glutation peroxidasa que es una de las encargadas de la protección contra la oxidación.
Otro aspecto muy beneficioso del selenio es que ayuda a la producción de espermatozoides, proceso que se conoce como espermatogénesis, por lo que beneficia la fertilidad masculina. Además, fortalece la tiroides, mejora el funcionamiento del sistema inmunológico y ayuda a mantener en buen estado el cabello, las uñas y la piel.
El selenio, igual que el zinc, actúa como antioxidante natural, protegiendo a las células y activando nuestras defensas. Además, si combinamos ambos nutrientes con las vitaminas A y C, aumenta la protección contra la oxidación derivada de la exposición al sol. De esta manera, la piel se recupera antes de las radiaciones solares.
Cantidades recomendadas de zinc y selenio
Hay pocos alimentos que tengan selenio y, los que hay, presentan cantidades bastante bajas, de ahí que los estudios reflejan una cantidad baja de selenio entre la población española sana.
La cantidad recomendada de selenio al día en una persona adulta es de unos 55 microgramos. La tiroides es el órgano donde se concentra más cantidad de selenio por gramos, por tanto, si hubiera un déficit de selenio, el funcionamiento de las hormonas tiroideas puede verse comprometido.
En cuanto al zinc, en adultos se requieren cantidades entre 6,2 mg y 10,2 mg diarios en mujeres y entre 7,5 y 12,7 mg en hombres. Estos parámetros dependerán de la cantidad de las sustancias que dificultan la absorción de los alimentos ingeridos.
El zinc contribuye a metabolizar mejor la vitamina A, hidratos de carbono, grasas y proteínas, además de mejorar las funciones reproductivas y órganos sexuales, mantenimiento de dientes, uñas, huesos, piel y pelo y el buen funcionamiento del olfato, gusto y vista.
Síntomas de carencia de zinc o selenio
La deficiencia de zinc en el organismo no se traduce en unas consecuencias directas sobre la salud, a no ser que se trate de casos muy concretos de afecciones cutáneas. Sin embargo, si el déficit es crónico puede haber retrasos en el crecimiento, una respuesta inmune deficiente, infecciones que tardan más en remitir, fatiga o trastornos menstruales.
La deficiencia crónica de selenio no está bien definida, aunque en zonas con suelos pobres en selenio se han detectado problemas óseos, musculares y cardíacos en niños y adolescentes.
La SEGO (Sociedad Española de Ginecología y Obstetricia) indica que el zinc debe incluirse en la dieta de las mujeres embarazadas porque ayuda en el desarrollo del feto. Lo que ocurre es que el 82% de este colectivo no llega a los niveles recomendados (20 mg durante el embarazo y 25 mg en la lactancia). Y en la población adulta, el porcentaje de personas que no alcanzan la cantidad mínima recomendada llega al 83%.
Alimentos con selenio y zinc
Estos son algunos alimentos donde están presentes minerales como el selenio y el zinc:
- Espinacas.
- Pepino.
- Champiñones.
- Pipas de calabaza.
- Nueces y otros frutos secos.
- Avena,
- Arroz integral.
- Pan integral.
- Chocolate negro.
Aunque sí es cierto que contienen zinc y selenio estos alimentos, deben tener al menos 8.25 mcg por 100 g. para decir que el producto aporta selenio y el doble para decir que es rico en selenio. En el caso del zinc, el alimento debe tener al menos 1.5 mg por 100 g, o 3 mg para decir que es rico en zinc.
Para llegar a las cantidades permitidas de zinc y selenio, desde Fepadiet te recomendamos consumir suplementos de estos nutrientes aparte de la dieta habitual. Disponemos de cápsulas de zinc, selenio y combinación de zinc, selenio y vitaminas A, C y D. Contacta con nosotros si tienes alguna duda. Estamos aquí para ayudarte.